Peluches charlatanes (podcast #28) - Eva Domínguez

29.12.23

Peluches charlatanes (podcast #28)
Esto es una transcripción del podcast. Podrás encontrar todos los episodios en las siguientes plataformas:
(Imagen creada con Dall.E)

 
¿Qué podrían tener en común un peluche que habla como si fuera una persona y Elon Musk? Enseguida te lo cuento.

Ya sabemos que la Inteligencia Artificial se filtra en todas partes. Y, por supuesto, también lo hace en los juguetes.

Te cuento el caso de una empresa llamada Curio, que ha lanzado unos peluches que hablan.

Eso no es nada nuevo. Ya sabemos que muchos muñecos hablan desde hace décadas.

Pero los de Curio van a tener auténticas conversaciones con los niños y niñas porque utilizan Inteligencia Artificial generativa.


Esta Inteligencia Artificial está creada por OpenAI, que es la empresa que ha desarrollado ChatGPT.

Bueno, aquí tienes la primera conexión con Elon Musk, porque el fundador de Tesla fue de los primeros inversores de OpenAI, aunque luego se fue.

Sin embargo, esta no es la conexión importante.

Resulta que la idea de hacer estos peluches charlatanes es de Grimes, una cantante canadiense que ha sido pareja de Elon Musk y con el que ha tenido tres hijos.

Los peluches se llaman Grok, Grem y Gabbo. Resulta que Grok también es el nombre de un asistente virtual o chatbot creado por Elon Musk, pero Grimes asegura que no hay ninguna relación.

Bueno, pues los peluches vienen con una aplicación con la que los padres podrán ver una transcripción de las conversaciones que sus bebés mantienen con estos muñecos. La empresa asegura que se eliminarán a los 90 días.

Estos peluches con IA se insertan en la larga tradición de muñecos parlantes y las preocupaciones por cómo las empresas utilizan estas tecnologías.


No son pocos los juguetes que se han denunciado o retirado porque se les acusaba de espiar a los menores grabando y guardando conversaciones o imágenes.

Un ejemplo es el de la muñeca Cayla que se conectaba a Internet para dar respuestas a las preguntas de los niños y que les preguntaba todo tipo de datos personales, incluso dónde vivían.

Se descubrió que era muy fácil de hackear y que, por tanto, ponía a los niños en una situación vulnerable.

Otro caso conocido es el de una Barbie que llevaba incorporada una cámara. Si habéis visto la película aparece como un modelo retirado.

Es normal que las preocupaciones de qué se hace con esos datos y quién podría acceder a ellos se acentúen con la incorporación de la IA generativa. Y ahí la vigilancia de los padres y la aplicación de la nueva normativa Europa son fundamentales.

Ahora bien, no cabe duda de que el uso consciente y legal de la IA en los juguetes infantiles los va a convertir en mágicos.


Imagina un peluche que sea divertido, que pueda consolar a tu bebé y entretenerlo, o que les ayude incluso a aprender.

Si ya teníamos juguetes con los que hablábamos de pequeñas, los bebés de ahora tendrán juguetes que parecerán personajes reales.

Quizá ahí resida el miedo inconsciente de que ya desde bebés nos acostumbremos a tener relaciones con objetos como si fueran de carne y hueso y podamos empatizar con ellos incluso más que con los de nuestra especie.

Sabemos que las relaciones humanas no están exentas de conflicto, pero es precisamente la superación de esos conflictos lo que nos ayudan a evolucionar.

Imagino que habrá de todo. En Disney ya están creando robots programados con Inteligencia Artificial, de lo que hablé en el capítulo 12, el robot de Disney.

No debe faltar mucho para que sean personajes con los que interactuar.

Y como probablemente no se dejarán fuera los ingredientes clásicos de sus narrativas. No faltará drama, conflicto y superación.