Si tienes una comida en un restaurante, nada más cómodo para desplazarse que un helicóptero. Lo dejas en cualquier zona verde y te evita un montón de atascos. Pero últimamente el aparcamiento de helicópteros se está poniendo fatal. Te pueden llegar a sancionar por deshojar cuatro margaritas con las hélices.
(Un militar retirado aterrizó sobre una microrreserva de flora en el Cabo de San Antonio, en Alicante)

No hay comentarios:
Publicar un comentario